Rajoy exige "seriedad" a las CCAA

BILBAO.- El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha reclamado "seriedad" a los responsables institucionales de las Comunidades Autónomas y les ha advertido de que no está "dispuesto" a que incumplan el objetivo de déficit establecido. También ha adelantado que el Ejecutivo "no se va a cansar de hacer reformas" porque está "dando pasos en la buena dirección" y ha defendido la del mercado financiero, aunque considera que se ha hecho "tarde, mal y a rastras".

   Durante su intervención con motivo del XIII Congreso del PP vasco que este domingo se ha clausurado en Bilbao, y, ante las críticas a las reformas adoptadas por su Gabinete, Rajoy ha advertido de que "el pueblo español le ha dicho al Gobierno que gobierne, y a la oposición, si quiere, que colabore".

   En este sentido, ha dicho que "desearía" esa colaboración, pero, de lo contrario, su "obligación" está en "gobernar, tomar decisiones, afrontar la crisis, ser valiente y actuar con determinación y coraje".

   Por ello, ha defendido que el Ejecutivo está "dando pasos en la buena dirección" y se ha mostrado convencido de que España abandonará la recesión si el Ejecutivo "sigue haciendo las reformas y no se cansa de hacerlas".

 "Y el Gobierno no se va a cansar", ha precisado.

   Rajoy ha dicho que no puede asegurar que España vaya a salir "ya" de esta situación" de recesión, pero ha garantizado que "saldremos".

"Estamos haciendo lo necesario para salir de esta decisión, que significa, en ocasiones, tomar decisiones muy duras y muy difíciles, que estamos haciendo cosas que no entran en nuestro programa electoral", ha apuntado.

   No obstante, ha advertido de que el PP seguirá "tomando todas las decisiones que tenga que tomar" para que el país salga de la crisis. Además, ha considerado que ésta es "una magnífica oportunidad", hacer las "grandes" reformas estructurales que se "debían haber hecho a lo largo de hace muchos años" con el objetivo de "sentar las bases para el futuro".

   También ha considerado necesario hacer "una política europea" que "mande un mensaje nítido, claro y contundente" de que el euro es "algo irreversible, que del euro no se sale y que a ningún país se le dejará caer del euro". 

"Eso es necesario y urgente", ha indicado.

   Según ha dicho, "reducir el déficit y las reformas" se deben hacer "a la vez" y es la causa por la que el Gobierno cada viernes "toma decisiones". "Y seguirá tomándolas cada viernes, hasta que se hayan puesto en marcha las reformas que necesita la economía española", ha puntualizado.

   Rajoy ha insistido en la necesidad de reducir el déficit público y cumplir el objetivo previsto, y, en concreto, ha aludido a las Comunidades autónomas. Tras afirmar que el Gobierno de España "no debe gastar" lo que "no tiene", ha añadido que esto es algo que también "deben hacer todos los Ayuntamientos y las Comunidades autónomas".

 "Todas, las grandes y las pequeñas", ha dicho.

   Ha avisado que el Ejecutivo que preside exigirá a las Administraciones autonómica "que lo cumplan" y les ayudará en ese objetivo. Sin embargo, ha reiterado su llamamiento "a todos los gestores y a todos los responsables políticos, sean de mi partido o de cualquier otro partido, que toca ser serios".

   "Tendrán que cumplir, como tendrá que cumplir el Gobierno de España. Y, desde luego, no estoy dispuesto a que nadie incumpla, yo el primero", ha advertido.

   Por otra parte, ha justificado la reforma del sistema financiero, aprobada este pasado viernes por el Consejo de Ministros para garantizar su saneamiento, que ha estado "sujeto a  muchas dudas en los mercados" y cuenta "con muchas dificultades para financiarse y no da crédito".

   A su juicio, el viernes se intentó "dar una solución definitiva, tras tres los de parches y soluciones parciales" y hacer "lo que se debía haber hecho hace cuatro años, y no se hizo". "Como no lo hicimos, tenemos que hacerlo ahora, tarde, mal y a rastras", ha dicho.

   Su intención es, según ha dicho, "dar una solución definitiva" y acabar con "las dudas" existentes sobre el sistema. "Trabajar para que vuelva el crédito y poner en el mercado, a precio de mercado, cientos de miles de viviendas que están impidiendo que el sector de la construcción vuelva a tirar", ha argumentado.