MADRID.- El Gobierno no prevé rescatar "a corto plazo" a ninguna de las autopistas que actualmente están en quiebra o en riesgo de insolvencia, dadas las medidas de ayuda que ha articulado, por las que, según asegura, ya ha concedido entre estas vías un total de 550 millones de euros.
De este importe, 469 millones corresponden a los préstamos
participativos concedidos a las autopistas y los otros 80,5 millones, a
los otorgados a través de las cuentas de compensacion, según la
respuesta del Ejecutivo a una pregunta parlamentaria escrita.
Con la línea de préstamos participativos, el Ejecutivo busca
ayudar a las autopistas a amortiguar el impacto de los sobrecostes de
expropiación que afrontaron, mientras que con las cuentas de
compensación contribuyen a atajar la caída de tráficos que estas vías
registran desde el inicio de la crisis.
"Habiéndose articulado medidas para tratar de resolver los
problemas, a corto plazo no se tiene previsto el rescate de las
sociedades concesionarias con malos resultados coyunturales", indica el
Ejecutivo en su respuesta parlamentaria, a la que tuvo acceso Europa
Press.
Las expropiaciones y el desplome del número de usuarios
constituyen las dos principales causas de la situación de quiebra o de
riesgo de quiebra que actualmente afrontan una decena de autopistas.
En respuesta a una pregunta escrita de la diputada y portavoz de UPyD, Rosa Díez,
el Gobierno reconoce que "la actual situación económica ha afectado
profundamente a los resultados económicos de las autopistas de peaje,
sobre todo a nueve de las 21 sociedades concesionarias del Estado".
Según el Ejecutivo, el origen del problema está en "la existencia
de un tráfico real muy inferior al estimado, tanto en los estudios de la
Administración, como en los de las ofertas que resultaron
adjudicatarias", y en los justiprecios de las expropiaciones de los
terrenos para la construcción de las vías. "Los jurados de
expropiaciones y los tribunales consideraron que los terrenos, en
general rústicos, debían ser valorados teniendo en cuenta las
expectativas urbanísticas", indica.
En la actualidad, de la decena de las sociedades concesionarias de
autopistas que afrontan desde hace tiempo el riesgo de quiebra, cuatro
ya se han acogido a procesos concursales. La Madrid-Toledo y la R-4
Madrid-Ocaña han solicitado el concurso, y la Cartagena-Vera y las
radiales de Madrid R-3 Madrid-Arganda y R-5 Madrid-Navalcarnero, el
preconcurso.
Estas cuatro sociedades están participadas por grandes
constructoras y entidades financieras, suman un pasivo de 2.171 millones
de euros y realizaron una inversión en la construcción y puesta en
marcha de las vías de 3.338 millones de euros.
En cuanto a una eventual imposición de peajes por circular por las
autovías, en respuesta a otra pregunta parlamentaria, el Gobierno
indica que "está trabajando con el objetivo de definir la transposición" de la directiva denominada 'Euroviñeta', que grava con una tasa a los camiones que circulan por las vías de alta capacidad".
En este sentido, sólo se limita a indicar que "la transposición de
dicha directiva, que entró en vigor el 15 de octubre de 2011, de acuerdo
a su artículo segundo, "debe realizarse obligatoriamente antes del 16 de octubre de 2013".